Los vecinos de El Nixticuil llevan queja ante la CEDHJ
Denuncian derribo de árboles, incendios intencionales y obras de particulares.
Vecinos de la colonia Colinas del Río y el Comité Salvabosque Tigre II presentaron ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) una queja en contra de autoridades de Zapopan, por incumplir la ley para la protección y cuidado del bosque El Nixticuil.
Gracias a ello, se ha permitido el derribo de árboles, incendios intencionales y trabajos de construcción de una empresa particular, cuando no cuenta con la licencia municipal respectiva.
“Denunciamos ante esta comisión al Ayuntamiento de Zapopan en sus direcciones de Obras Públicas, Ecología y de Inspección y Reglamentos, por no cumplir con las atribuciones que le marca la ley, al permitir el derribo de docenas de encinos e incendios provocados en un predio que forma parte del Ejido Zapopan, conocido como La Roblera, dentro del bosque El Nixticuil; además de la destrucción del sotobosque por la remoción de tierras que realiza la empresa Armadrill para la construcción de pozos profundos en el mismo predio”, se señala en el documento que se entregó a la CEDHJ.
Los integrantes del Comité Salvabosque Tigre II han encabezado la defensa del bosque de El Nixticuil desde hace más de dos años. En la queja presentada ante la CEDHJ el pasado martes, junto con los vecinos de la colonia Colinas del Río, aseguran que comprobaron que el ejido de Zapopan realiza trabajos desde hace dos meses de forman ilegal, “ya que no cuentan con ninguna licencia o permiso de urbanización o edificación otorgado por la Dirección de Obras Públicas al Ejido Zapopan”.
Señalan también que la Dirección de Ecología de Zapopan “tampoco ha recibido ningún estudio de impacto ambiental referente a esta área boscosa, que tiene como destino ser de agostadero y no de uso inmobiliario”.
Al final de su queja, los vecinos consideran responsables a las autoridades mencionadas por “encubrir las violaciones a la legislación vigente, y de vulnerar nuestros derechos humanos de tercera generación a un medio ambiente sano y digno, al negarse a verificar y dictar las medidas necesarias para detener estos trabajos”.
La queja se acompañó de la respuesta de la Unidad de Transparencia de Zapopan, que confirmó la falta de permisos de construcción y de falta del estudio de impacto ambiental del área llamada La Roblera. Adjuntaron además trece fotografías y un video en el que documentan los daños denunciados.
Gracias a ello, se ha permitido el derribo de árboles, incendios intencionales y trabajos de construcción de una empresa particular, cuando no cuenta con la licencia municipal respectiva.
“Denunciamos ante esta comisión al Ayuntamiento de Zapopan en sus direcciones de Obras Públicas, Ecología y de Inspección y Reglamentos, por no cumplir con las atribuciones que le marca la ley, al permitir el derribo de docenas de encinos e incendios provocados en un predio que forma parte del Ejido Zapopan, conocido como La Roblera, dentro del bosque El Nixticuil; además de la destrucción del sotobosque por la remoción de tierras que realiza la empresa Armadrill para la construcción de pozos profundos en el mismo predio”, se señala en el documento que se entregó a la CEDHJ.
Los integrantes del Comité Salvabosque Tigre II han encabezado la defensa del bosque de El Nixticuil desde hace más de dos años. En la queja presentada ante la CEDHJ el pasado martes, junto con los vecinos de la colonia Colinas del Río, aseguran que comprobaron que el ejido de Zapopan realiza trabajos desde hace dos meses de forman ilegal, “ya que no cuentan con ninguna licencia o permiso de urbanización o edificación otorgado por la Dirección de Obras Públicas al Ejido Zapopan”.
Señalan también que la Dirección de Ecología de Zapopan “tampoco ha recibido ningún estudio de impacto ambiental referente a esta área boscosa, que tiene como destino ser de agostadero y no de uso inmobiliario”.
Al final de su queja, los vecinos consideran responsables a las autoridades mencionadas por “encubrir las violaciones a la legislación vigente, y de vulnerar nuestros derechos humanos de tercera generación a un medio ambiente sano y digno, al negarse a verificar y dictar las medidas necesarias para detener estos trabajos”.
La queja se acompañó de la respuesta de la Unidad de Transparencia de Zapopan, que confirmó la falta de permisos de construcción y de falta del estudio de impacto ambiental del área llamada La Roblera. Adjuntaron además trece fotografías y un video en el que documentan los daños denunciados.
Guadalajara•Rubén Martín
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