Público:

La remoción de tierra para el fraccionamiento es ilegal, sostiene comité de vecinos

Salvabosques denuncian a Altavista ante la Profepa

Ciudad y Región

El Comité Salvabosque El Tigre II interpuso denuncia popular ante la delegación Jalisco de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), por hechos que considera irregulares en relación con un banco de materiales y el fraccionamiento Altavista Residencial, enclavado en el valle de Tesistán, en la zona de río Blanco, en Zapopan.

“En un predio cercado del bosque del Nixticuil, denominado Rancho Nuevo, propiedad del Corporativo Guadalajara o Fideicomiso BBVA Bancomer […] se están realizando labores extractivas de material de construcción, apertura de vialidades y de urbanización en terrenos forestales para el fraccionamiento Altavista Residencial, que corresponde a la primera parte de un proyecto inmobiliario mayor denominado Mirasierra de Zapopan, afectando aproximadamente quince hectáreas de zonas agrícolas y de bosque de pino-encino de El Nixticuil”. El terreno, precisan, se ubica sobre avenida Río Blanco y colinda al sur con las avenidas Valdepeñas y De Las Flores.

El área de las remociones de suelo corresponde a una zona núcleo del área protegida El Nixticuil-San Esteban-El Diente, añade, y el proyecto afectará también una “zona de recuperación”, lo cual se realiza sin trámites ambientales ni ante la autoridad estatal ni la federal. Aseguran que parte del predio se incendió el 19 de marzo de 2010 y por ello, la ley prevé que no se puede otorgar en él un cambio de uso de suelo durante al menos 20 años.

Respecto a esta denuncia, el director de Mirasierra, Joseph Rodrik Medina, aseguró que hay datos erróneos: indicó que tanto el banco de materiales como el incendio referidos no corresponden a la propiedad de la desarrolladora, y reiteró que cuentan con todos los permisos otorgados por el Ayuntamiento de Zapopan.

La falta de permisos ambientales estatales o federales, añadió, se debe a que fue la propia Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) la que los eximió de tal trámite en el ámbito de Jalisco, mientras que su propia investigación le llevó a asegurarse de que la zona no es de competencia federal, pues está catalogada como “área agrícola”, situación —ésta última— que los salvabosques consideran “verdad a medias”, pues hay un área arbolada que aunque no esté dentro del polígono de la reserva protegida, requiere de trámite federal por tratarse de una zona forestal o de preferencia forestal según la ley en la materia.

Lo cierto es que la Semades eximió a la inmobiliaria de un estudio de impacto , el pasado 31 de mayo de 2010, por considerar que el asunto es “atribución del municipio” (oficio Semades 336/2763/2010).

Semades exime a desarrollador de estudio

La encargada del despacho de la dirección general de Protección Ambiental y Desarrollo de la Semades, Mónica Reyes Garrido, el pasado 31 de mayo de 2010 le dijo a Joseph Rodrik Medina, director de Mirasierra y de Altavista, que no necesitaba analizar el impacto ambiental desde el punto de vista de la legislación estatal.

“Derivado […] de la fundamentación en la realización y autorización del Plan de Desarrollo Urbano del Centro de Población, y elaborado su plan parcial de desarrollo Subdistrito ZPN-3-03, en donde se ubica el mencionado proyecto de desarrollo habitacional, a ésta Secretaría no corresponde atender los Estudios de Impacto Ambiental, siendo una atribución del municipio”, dice el texto.

Guadalajara/Agustín del Castillo