miércoles, 2 de febrero de 2011



Corporativos inmobiliarios tratan de intimidar la defensa del bosque amagando con intervención militar. Héctor Vielma respalda la comercialización del fraccionamiento con el que invaden El Nixticuil.


Boletín de Prensa 3/02/11







Continúa la invasión inmobiliaria de los corporativos Tierra y Armonía, GVA y GIG con el fraccionamiento AltaVista Residencial al Bosque El Nixticuil, con incondicional apoyo institucional a la depredación de los espacios naturales que promueve el capitalismo voraz.


En el contexto de la militarización y con el objetivo de intentar amedrentar la organización comunitaria que se ha dado por defender el bosque, en diferentes puntos del perímetro que comprende la urbanización de AltaVista, los empresarios inmobiliarios han colocado letreros con la amenaza de “supervisión militar” los cuales además de prohibir el paso, a la letra dicen:


NO SE PERMITE EL USO COMO AREA DE ESPARCIMIENTO, NO SE PERMITE EL USO COMO AGOSTADERO PARA GANADO EN ESTE PREDIO, NO SE ARRIESGUE NI ARRIESGUE SU GANADO.

Nos parece un asunto grave que no obstante los delitos ambientales que están cometiendo, éstos corporativos sigan operando con impunidad y además traten de intimidar presumiendo contar con el servicio particular de militares y se amenace utilizando este tipo de elementos institucionales. Esta acción descubre nuevamente la farsa de lo escrito por José Manuel Gómez Vázquez Aldana (GVA) en su columna semanal del diario Informador, cuando por un lado habla reiteradamente de la inseguridad y la ilegalidad y por el otro amaga y hace uso de ésta en sus negocios particulares una y otra vez.

Habría que preguntarle públicamente a la XV Zona Militar con sede en Guadalajara, qué tipo de actividades está realizando para estos corporativos inmobiliarios y cuál es el objetivo que cumple supervisando obras particulares como ésta, en la que se están cometiendo crímenes ambientales, pues de comprobarse que lo anterior es falso, los corporativos Tierra y Armonía, GVA y GIG incurrirían nuevamente en actos criminales, esta vez según lo contenido en el Artículo 250 bis. del Capítulo VII del Código Penal Federal, el cual se refiere a la “Usurpación de funciones públicas”.


Continuando con su labor de encubrimiento, el Ayuntamiento de Zapopan no solo ha permitido a los empresarios inmobiliarios cometer delitos ambientales con la invasión de zonas boscosas, al Área Natural Protegida del Nixticuil, y la amenaza de intervención militar; ahora además les está respaldando en las acciones de comercialización de AltaVista encubriendo las faltas administrativas que han estado cometiendo con la instalación de cientos de señalizaciones que van desde letreros permanentes de metal, (colocados en los camellones del cruce de diversas avenidas) así como carteles y pendones en los postes de alumbrado de avenidas colectoras como De la Mancha y principales como Juan Gil Preciado (Tesistan) para la promoción del fraccionamiento, mismos que según lo establecen los artículos 40° y 52° del Reglamento de Anuncios para el Municipio de Zapopan están prohibidos, por lo que son motivo de multa y debieran ser retirados.

El alcalde Héctor Vielma que ha evitado el tema, demuestra nuevamente con lo anterior favorecer los negocios particulares de sus amistades y compañeros de partido como es el caso de Raymundo Gómez Flores quien como ya hemos dicho es dueño del Consorcio GIG, promotor del proyecto ecocida.

Comité Salvabosque

En defensa del bosque El Nixticuil


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