Ágora
Durante la presentación del tercer informe sobre la situación de los derechos humanos en Jalisco que presentó el Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad), lo constante fueron las críticas al trabajo del presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), Felipe de Jesús Álvarez Cibrián, por sus omisiones en un estado donde –según se acredita en el informe– continúan existiendo la violencia institucional contra las mujeres, la tortura, los feminicidios, la persecución, la represión y la violación a muchos otros derechos fundamentales.
Antes de dar la voz a algunos miembros de organizaciones civiles que contribuyeron a la realización del informe 2009, César Octavio Pérez Verónica, miembro del Consejo Directivo de Cepad, recordó que ayer se cumplieron tres años del fallecimiento del joven Néstor Alán Rodríguez Licea en un accidente automovilístico provocado por el hijo de un alto funcionario del gobierno estatal y lanzó el primer dardo: “El absurdo es encontrar a una Comisión Estatal de Derechos Humanos incapaz de resolver una queja de tanta trascendencia. Conviene decirle al ombudsman que la sociedad no requiere de una defensa construida desde los pasillos de la oficialidad, distante de la completa reparación que buscan las víctimas”.
Pero el señalamiento se hizo extensivo hacia los gobiernos federal y estatal y Pérez Verónica indicó que en materia de derechos humanos el balance ha sido negativo.
“Un hecho lamentable para la historia de Jalisco, es la forma en que los poderes públicos y fácticos decidieron reformar la Constitución local para considerar que la vida inicia a partir de la concepción, sin ni siquiera considerar la posibilidad de escuchar las voces de los y las defensoras de los derechos humanos de las mujeres, de las organizaciones de la sociedad civil y de las y los académicos, pero principalmente de las mujeres de Jalisco. En cuanto a los feminicidios en Jalisco, se registran sobre todo en jóvenes que van de 21 a 40 años, y se calcula que de 1997 al 2009 han ocurrido 581 asesinatos; un promedio de 44 casos por año”.
El documento presentado por Cepad contiene 17 textos con los que se busca conjuntar las voces de organizaciones civiles que luchan desde distintos ámbitos y con distintas perspectivas por los derechos humanos.
Así, en el informe se incluyen textos elaborados por miembros de colectivos como Ciudad para Todos, Comité Salvabosuqe Tigre II, Agenda Feminista, Comité Salvemos Temacapulín, Imdec y el propio Cepad.
Durante la presentación, Éttiene von Bertrab, María de Jesús García Guzmán, Laura Sofía Herrera Rivera y María Guadalupe Ramos Ponce comentaron los textos que redactaron para el informe y en todos se mostró la forma en que gobiernos municipales y estatal han vulnerado garantías y derechos como la libre manifestación, libre tránsito, derecho a la vida, derecho a un medio ambiente limpio o a las decisiones sobre el propio cuerpo.
Entre los casos paradigmáticos que se abordan en el informe se encuentran la situación que vive el pueblo wixárika frente a la construcción de una carretera que pretende atravesar su territorio, la angustia de los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo ante el proyecto de la presa El Zapotillo, la pretendida destrucción del bosque de El Nixticuil en Zapopan por intereses inmobiliarios, y la actuación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco en casos como el de la consejera ciudadana Paola Lazo.
El texto se puede consultar en www.cepad.org.mx.
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