skip to main |
skip to sidebar
GUADALAJARA, JALISCO (18/OCT/2012).- La Secretaría de
Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) delegación Jalisco
emitirá en los próximos días la resolución del cambio de uso del
proyecto Mirasierra, un fraccionamiento que pretende construirse a un
lado del Bosque El Nixticuil-San Esteban-El Diente, que ha sido polémico
ya que en algunos polígonos ha habido incendios forestales y el permiso
debería negarse por 20 años a partir del incidente, de acuerdo con la Ley General de Desarrollo Forestal.
Desde
2009, el desarrollo fue cuestionado porque algunos de los polígonos
invadían el área natural protegida y por el impacto hidrológico de la
urbanización de más de 60 hectáreas. El 8 de marzo de 2010, los
constructores solicitaron el desistimiento, ya que detectaron que era
necesario hacerle modificaciones a la Manifestación de Impacto
Ambiental. Posteriormente lo reingresaron y el 3 de mayo de 2011, la
Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental de Semarnat emitió la
autorización a favor del fideicomiso Mirasierra BBVA Bancomer, que
integra a empresas como Consorcio G, Gómez Vázquez Aldana GVA y Tierra y Armonía.
Ahora, lo único que le falta a la empresa para empezar a operar es el cambio de uso de suelo.
El
Comité Salva Bosque Tigre II señala a través de un comunicado que esa
autorización no debe otorgarse, ya que ellos registraron y reportaron a
los medios locales distintos incendios en los polígonos 1, 5 y 7.
Además
de ese impedimento legal, de otorgarse el cambio de uso de suelo, "el
bosque se verá severamente afectado por la disminución en la capacidad
de captación de agua al acuífero, pues sufrirá la devastación de áreas
donde la infiltración de agua es media-alta o alta".
La MIA, que puede consultarse en la página web de Semarnat (en el apartado consulta
tu trámite), señala que al año serán extraídos casi dos millones de
metros cúbicos de agua de nueve pozos profundos, lo cual es "una clara
violación al Área de Protección Hidrológica que es El Nixticuil, cuya
integridad depende en gran medida de garantizar el respeto por el
decreto estatal que así la ha catalogado. Y aunque esta figura de ANP no
existe a nivel federal, Semarnat, como instancia máxima en materia
ambiental del país, debe también sujetarse al cumplimiento de dicho
decreto.
Por otro lado, la consultora Biosferazul, que realizó la
MIA y el documento para solicitar el cambio de uso de suelo, es la
misma que realizó el proyecto de la Villa Panamericana, el cual también
ha sido polémico por las descargas de aguas residuales a cielo abierto
en una zona de recarga de acuíferos.
El director de la empresa,
el biólogo Luis Osvaldo Toro Vaca (quien antes trabajó en el área
forestal de la Semarnat), minimizó en diciembre de 2011 las afectaciones
por las descargas.
En la misma empresa labora Patricia Fregoso
Cruz, ex secretaria técnica de la Secretaría de Medio Ambiente y
Desarrollo Sustentable (Semades) durante la gestión de Martha Ruth del
Toro. Esa misma dependencia estatal, coincidentemente, es la que revisó y
autorizó el proyecto de la Villa Panamericana.
Por ello, el
Comité Salva Bosque "exige públicamente a la Semarnat" que dé
cumplimiento a la normatividad ambiental vigente y emita una resolución
negativa para los cambios de uso de suelo solicitados por los
promoventes de Mirasierra, "pues de otra manera antepondría el interés
del gran capital y la clase político al respecto de uno de los últimos
bosques cercanos a la ciudad".
EL INFORMADOR / ALEJANDRA GUILLÉN
0 comentarios:
Publicar un comentario