La Jornada Jalisco:

El Lobby

RAÚL TORRES

La presión inmobiliaria que se cierne sobre el bosque del Nixticuil-San Esteban- El Diente, los embates por hacer que el predio El Disparate salga de la zona de protección de la Barranca de Huentitán, los desacuerdos que hicieron fracasar el proyecto de la Villa Panamericana en el parque Morelos y hoy la tienen dando tumbos por toda la Zona Metropolitana, son reflejo de la forma en que la clase política intenta, antes de dejar sus puestos con cargo al erario, amarrar ciertos negocios que de una forma u otra, ante el incierto futuro que no asegura la permanencia en la nómina pública, sigan proveyendo lo necesario para vivir como se acostumbra.

El negocio de al menos 2 mil millones de pesos que significa la construcción de la Villa Panamericana es ya pugna política partidista y de grupos dentro de los mismos partidos políticos. Y en todo ese marasmo de intereses, la Villa Panamericana vuelve a apuntar en dos sentidos que están no sólo conectados por este tema: El Nixticuil y El Disparate.

Sin ignorar el proyecto que ya se fragua para que la Villa Panamericana se erija en terrenos ubicados en la zona de Periférico y Vallarta, en Zapopan, el alcalde de la ex villa maicera, Juan Sánchez, asegura que el ayuntamiento a su cargo considera que el sitio ideal para el albergue deportivo es el valle de Tesistán por el desarrollo que se está generando en la zona y por la belleza natural de El Nixticuil.

Por su parte, y luego de decir y desdecir sobre el futuro de la Villa Panamericana en el municipio de Guadalajara, el alcalde Petersen vuelve a meter a El Disparate en el paquete de las opciones probables porque supuestamente hay quien trabaja en una propuesta ubicada dentro de ese predio pero donde sí hay uso de suelo adecuado.

Así, la Villa Panamericana trae a colación un tema que además toca de rebote a la presa de Arcediano. Y es que una de las condiciones impuestas por el gobierno federal para la construcción de la Presa de Arcediano fue que se hiciera la declaratoria de Área Natural Protegida de las cuencas de los ríos Verde y Santiago. Esta declaratoria de más de 56 mil hectáreas implica que varios municipios del estado implementen medidas de protección para buena parte de sus territorios, generalmente en predios codiciados por su belleza y riqueza natural, donde los desarrolladores inmobiliarios ven una inmejorable oportunidad jugosas ganancias.

En el caso del Disparate ya los especialistas de la UdeG que hacen frente en este caso se han encargado de explicar porqué es importante que en ese polígono no se construyan ni el estadio de atletismo ni la Villa Panamericana. En el caso de El Nixticuil son los propios vecinos del bosque los que están levantando la voz para intentar explicar que un desarrollo inmobiliario que podría extraer del subsuelo de Tesistán más de un millón de litros cúbicos de agua por año dañaría severamente al bosque y la microcuenca del Río Blanco, uno de los afluentes del Santiago que también debe ser protegido.

Así, desde El Nixticuil hasta El Disparate el problema es el mismo, se genera por los mismos intereses y afecta los mismos sitios. Sería bueno entonces comenzar a preguntarse por qué el retraso de la Comisión de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) para sacar una declaratoria (la de las 56 mil hectáreas) que debió estar lista desde julio o agosto. Y de esa pregunta pueden derivar otras: ¿será la Conanp en todos los casos igual de laxa que en El Disparate, donde por considerar que con la construcción del estadio no habría afectaciones a “nivel sistemico” puede excluirse ese predio de la declaratoria de área protegida?

La casa paga

Aprovechando las fechas patrias, el futuro gobierno de Aristóteles Sandoval en Guadalajara movió sus piezas intentando generar lazos con el gobierno federal y la Presidencia de la República. Para ello envió a la ciudad de México a Alberto Mercado, una de las personas de confianza del alcalde electo y quien parece estarse convirtiendo también en una de las principales vías de comunicación de Sandoval Díaz con ciertas esferas del gobierno federal.